Carmen Lomana ha dictado un libro. Ha tenido el buen gusto, incluso, de citar en una entrevista al negro que puso en blanco sobre negro sus grabaciones. Además, tiene la educación de personalizar las dedicatorias sin perder el gesto amable. Espasa se va a forrar.
La progresía rampante se tirará de los pelos... del sobaco.
No lo puedo evitar, a pesar de su voz nasal, sus labios exagerados y sus coloridos chillones, esta mujer me cae bien. Es honesta en su pijerío, en su edad y en su modesta riqueza heredada... pero ojo que antes que consorte trabajó para el Banco Santander en Londres. Hace muchos años, cuando a las mujeres se les negaba el acceso a trabajos de relumbrón. Osea que...
La pobre vicerpesidenta De la Vega, siempre quiso ocupar ese puesto de inspiradora de estilo femenino... para su desgracia. Quiso ser una socialista glamurosa y se quedó en la vieja loca de "El ocaso de los dioses". Usted perdona señora por señalar, pero sus comparecencias tras el Consejo de Minisros me dan tanta dentera como miedo.
Carmen Lomana, sin embargo, ha llegado a las chicas poligoneras y las he visto, puestas de punta en lentejuela, hacer cola en las boutiques de la Noche de la Moda.
Desde que el mundo es mundo, a las chicas les ha gustado soñar con ser alguien de mayores. Antes se ponían los tacones de mamá y ahora los shorts de la abuela, pero la idea viene a ser la misma. Si ahora quieren ser de mayores Carmen Lomana eso que habremos salido ganando.
¿Cómo hablaría por teléfono una fan de Carmen Lomana?
Para tenerlo de cuadro/poster inspirador en su cuarto, sólo tiene que pedírmelo en un correo y hablaremos del formato, tamaño, soporte y precio por tener una obra de arte digital como copia o propiedad exclusiva del original.
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